EL SILENCIO

Existe un libro llamado "el camino de los justos", este libro habla de etica moral del judaismo, es de un autor desconocido y antiguamente se llamaba "Libro de los atributos" porque justamente habla de los atributos (buenos y malos) del ser humano y quise tomar algunas partes para compartir con ustedes de un atributo llamado "El silencio".

LA LENGUA ES PEOR QUE LA ESPADA.
El que acostumbra a guardar silencio se salva de muchas trasgreciones, tales como la adulación,la burla,la mala lengua,la mentira,el insulto y la grocería. Pues cuando alguien lo insulta y le dice grocerías, si le responde, sólo consigue que le diga el doble.Por eso enseña el sabio: "Cuando escucho algo malo, guardo silencio". Entonces le preguntaron,: Por que ?, y les dijo: "Porque si contesto a quien me insulta, me temo que acabaré escuchando peores insultos que al principio". Y dijo, "Cuando el insensato discute con un sabio, pero el sabio calla, con eso le da mejor respuesta", pues el insensato sufre más con el silenciodel sabio que si hubiese recibido respuesta. Sobre tal caso esta escrito: "No respondas al insensato según su insensatez".  Además, pueden revelarse secretos al que sabe callar, pues como no es muy dado a hablar, no va a revelarlos. Y Tampoco tiende a hablar CHISMES, sobre lo que esta escrito, "La muerte y la vida estan en poder de la lengua", pues el hombre hace más con la lengua que con la espada. La persona que se encuentra aquí, con la boca puede ocasionar que condenen a muerte al que esta lejos, mientras que con la espada  no se mata sino al que está cerca.  Por eso el hombre fue creado con dos ojos, dos orejas, dos fosas nasales, pero con una sola boca, para indicar que debe hablar poco. "El silencio sienta bien a los sabios, y co mucha mayor razón a los ignorantes"   "El silencio es una barrera protectora para la sabiduría", "La panacea universal es el silencio".

Esto en cuanto a este libro sumamente interesante y lleno de sabiduria, pero que decir de lo que dijo el propio hermano de Yashua (Jesus) al cual hay que tomarlo en mayor consideración que lo habitual, ya que no hay que olvidar que por ser hermano del Mesias, me permito pensar, compartió momentos de intimidad familiar, de profundisación de la Palabra, de preguntas cara a cara y principalmente el privilegio enorme de mas tiempo (años) que los demas discipulos, de estar al lado de Yashua (Jesus).  Veamos lo que dice Jacobo (Santiago) :

Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros sabiendo que recibiremos mayor condenación.
  Porque todos ofendemos en muchas cosas. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, que   también puede con freno gobernar todo el cuerpo.
  He aquí nosotros ponemos frenos en las bocas de los caballos para que nos obedezcan, y gobernamos todo su cuerpo.
  Mirad también las naves: aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde quisiere el que las gobierna.
  Así también, la lengua es un miembro pequeño, y se gloría de grandes cosas. He aquí, un pequeño fuego ¡cuán grande bosque enciende!
  Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Así la lengua está puesta entre nuestros miembros, la cual contamina todo el cuerpo, é inflama la rueda de la creación, y es inflamada del infierno.
  Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres de la mar, se doma y es domada de la naturaleza humana:
  Pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado; llena de veneno mortal.
  Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos á los hombres, los cuales son hechos á la semejanza de Dios.
   De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, no conviene que estas cosas sean así hechas.
   ¿Echa alguna fuente por una misma abertura agua dulce y amarga?
   Hermanos míos, ¿puede la higuera producir aceitunas, ó la vid higos? Así ninguna fuente puede hacer agua salada y dulce.
(Santiago 3:1.12)

Y por ultimo, algo que YHWH, nuestro Dios nos manda, no nos sugiere, nos manda:
   
Habla a toda la congregación de los hijos de Israel, y diles: Santos seréis, porque santo soy yo, el Señor vuestro Dios. (Levitico 19:2)

Shalom.